sábado, 7 de noviembre de 2015

SOBREVIVIR EN VENEZUELA

Es increíble la vorágine que se vive en Venezuela, la corrupción inmensa que comienza por el ciudadano común, desde que los peatones no usan el rayado ni respetan la luz del semáforo, aun a costa de poner en riesgo su propia vida, pasando por los motorizados que fungen como el mejor indicio de anarquía que haya podido conocer la historia,

Ellos amenazan los estatutos legales de las leyes de transito y movilización en todas sus versiones y posibilidades, van desde circular sin casco, sin licencia, con menores en riesgo, en contra flujo, por las aceras (y con el denuedo de reclamar al peatón que se atraviesa en el brocal), delante de los ojos relajados de las autoridades que se limitan a mirar a otro lado,
Los empleados de empresas privadas que se llevan desde el papel, los clips y todo aquello que vean posibilidad de sacar sin ser vistos o detectados, negocian desde los puestos que ocupan y se hacen acreedores de beneficios monetarios por cumplir con las obligaciones que la empresa les paga por cumplir, desde los obreros de mantenimiento cargando papel higiénico y desinfectantes hasta el jefe de compras recibiendo dádivas para comprometer la aprobación de ciertos pedidos, funcionarios públicos que en su posibilidad venden por sumas de dinero la aprobación de tramites fraudulentos en organismos públicos, desde certificados médicos, licencias de conducir, hasta documentación de curso legal como cédulas, visas y pasaportes, pasando por adquisición de vehículos, viviendas o créditos de ayuda a emprendedores, que por las sumas correctas pueden ser obtenidos casi domiciliarmente, pasando por contratos de servicios y vista gorda a multas y revisiones fiscales, desviación de medicamentos e insumos en hospitales por parte de médicos y personal administrativo de estas instituciones de servicios al ciudadano, todo con el fin de sobrellevar los miseros sueldos que perciben, en la mayoría de los casos no acordes ni a las capacidades de quienes las desempeñan ni a las responsabilidades que exige la organización, puestos allí a dedo por políticos con visión popular de la gerencia del estado, por llamarla de algun modo.

Y esto es solo un trozo de la punta del iceberg que flota a la deriva hacia su propia destrucción, lo vemos a diario, al usar cualquier medio de transporte, masivo o privado, en donde somos participes de la ley del mas fuerte, donde un sujeto joven y fuerte puede tener frente así a una anciana con un bastón, con un visible problema de salud y simplemente desde su asiento se limita a fingir que esta dormido (así tenga 5 segundos que participo en una violenta trifulca para tomar el asiento) y aun cuando alguien lo llamare increpándole compasión para la anciana, el mismo botara una sarta de improperios por su boca, incluso llegaría a amenazar al osado que lo despertó del reparador sueño y volverá a dormir sin desparpajo.

La movilidad viene siendo afectada en gran medida por la escasez de repuestos para el parque automotor, y a su vez por las grandes brechas creadas entre los medios de transporte, como la evidenciada en el diferencial de precios de los servicios; un pasaje en autobús Valles del Tuy - Caracas tiene un costo de 75Bs, motivado al alto costo de los repuestos e insumos involucrados en el servicio, donde podemos ver como un solo neumático para un transporte puede superar los 80.000 Bs, contando ademas que cuando el transportista va a buscar dicho repuesto se enfrenta a la escasez evidenciada en el ya conocido termino NO HAY, es abrumador ,  por lo que paradojicamente el mismo viaje en Ferrocarril tiene un costo de tan solo 4Bs, adicionalmente las personas mayores de 60 años viajan gratis (logro social importante que afecta el tejido social), esto ocasiona un des balance en el uso del servicio ya que como es lógico los Ciudadanos buscan la manera de viajar en el medio mas económico y personas como las de la tercera edad que antes pasaban sus años de oro reposando en sus hogares, o colaborando en el cuidado de los nietos, se han visto lanzados al movimiento que les permiten estos beneficios, todo ello ha afectado el comportamiento social del Venezolano y hasta la familia, ya no tenemos en general quien inserte valores en los menores lo que retornara en el aumento de los indices de natalidad prematura y delincuencia, ahora todos quieren trabajar en la capital, abandonan el trabajo en la tierra, o en zonas dormitorio con micro negocios, el cuidado de los hijos, nadie se preocupa por la producción de ninguna índole y las masas se movilizan a cumplir labores mayormente de construcción por opciones generadas por el plan social de vivienda del gobierno en la gran ciudad, todo el mundo a laborar en la capital, pues solo allí hay fuentes de ingreso, todo esto ha aumentado en forma desproporcionada la cantidad de personas que viajan diariamente desde las ciudades dormitorio a hacer vida en la capital, que ahora se cuentan en cientos de miles, creando nuevas castas de ciudadanos y nuevos tipos de trabajadores como los vendedores informales en los medios masivos, también nuevos tipos de delincuencia que aplican sobre las masas que se movilizan y los jóvenes que finalmente se quedan solos en las ciudades dormitorio, con un ocio triste y vergonzoso que muy posiblemente  terminara en delincuencia.

Este es el hombre nuevo, la nueva generación que llevara al país al futuro, ese mismo hombre que debe hacer marañas inusitadas para sobrevivir, ya que con un sueldo mínimo es materialmente imposible sobrevivir, este mismo hombre es el que hace una larga fila, y cuando decimos larga no exageramos, hablamos de llegar a las 3 de la madrugada para tomar lugar en dicha fila (con la posibilidad de a esa hora obtener el lugar 50) con la finalidad de poder comprar productos de la cesta básica regulada (Regulación impuesta por el gobierno) y así poder llevar a su hogar el alimento básico necesario. (llámese arroz, pastas, pollo, carne, mantequilla, etc), añadiendo que solo sera atendido si su numero final de su documento de identidad corresponde al día en que le fue asignado comprar (control impuesto por el gobierno), aunado a que cuando comienza a realizar dicha fila ignora si llegaran productos y mucho menos cuales, al establecimiento en el cual eligió hacer fila, y sin contar que quizás no comprara lo que quiere o necesita sino lo que pudiera llegar, por ejemplo que necesitare leche para su prole y que al abrir el establecimiento solo llegara arroz, que pudiera ser que tuviera ya, lo que lo obligaría obviamente a comprar de igual manera por que ES LO QUE HAY, o en un peor caso (posible) que no llegara nada y perdiera el madrugon y el sofoco de haber hecho la fila en la que invirtió una cantidad importante de horas y esfuerzo.

Añadiendo que motivado la escasez de productos ya el ciudadano no se preocupa ni de la calidad de los producto, mucho menos de saber que marcas consume, solo lo vence el conformismo ES LO QUE HAY.

Estas filas producen un importante nivel de estrés en la población en general lo que posibilita la aplicacion de métodos especulativos que producen el espiral inflacionario que vivimos.
Ciudadanos sin escrúpulos empiezan a vender los productos regulados y escasos como repuestos, alimentos, medicinas, pañales, etc. al precio que la tripa les pudiera indicar ese día, o quizás de acuerdo a la cara o estampa del necesitado que requiere el producto (si tiene cara de clase media, o es un "amigo"), así nacen los nombrados BACHAQUEROS (especuladores), [nombre que alude a la laboriosa hormiga que en filas consigue proveer alimento para el hormiguero], quienes obtienen el producto regulado generalmente gracias a "contactos" o "amigos" que se lo venden al precio de mayor, y por bultos y que ellos delicadamente y con gran fruición venderán al detal y a 10 veces su precio (siendo recatados), obteniendo ganancias 10 veces mayores que el fabricante del producto que tiene sobre sus hombros toda la carga económica de la producción o importación y controles gubernamentales, y sin entender que todo esto solo genera un espiral inflacionario que indefectiblemente le romperá la nariz cuando regrese a el (porque regresara a el), lo que el hoy vende con satisfacción mañana se lo cobraran a el con creces en otro producto que el no posea.

Caer en las manos de los bachaqueros implica el derroche del sueldo que percibas a un ritmo vertiginoso, salvo que seas bachaquero y por ende estés provisto del ingreso que te proteja eventualmente hasta conseguir alguien que te desplume igualmente.

La ley del mas fuerte nuevamente, esto explica porque un producto que el fabricante (quedan pocos) lleva al mercado con un precio para la venta de 19 Bs ( Harina de maíz pre cocida) incluidos sus costos y gastos mas ganancia (es decir el comerciante o distribuidor paga 15Bs y debería ganarse un 30%), puede llegar a un ciudadano a un precio de 150 Bs, lo que según mi percepción es socialismo salvaje a su máxima expresión, o onda especulativa inmoral.



Los Ciudadanos de a pie, los que no son comerciantes, industriales, empresarios ni bachaqueros (LA MAYORIA DE LA POBLACION), están desvirtuados (no poseen virtudes), todas esas personas solo tratan de sobrevivir y el gobierno en general no implanta estrategias para controlar los verdaderos orígenes de los problemas, se dedica a atacar y controlar la producción y precios al grito de "Guerra Económica", transformando la producción en importación, concentrando el flujo de divisas en la compra de alimentos y enseres ya procesados para el pueblo, colocando barreras a los productores nacionales para obtener divisas para adquirir materia prima, con la excusa de que atacan la patria y la independencia cuando las tecnologías de producción son de origen extranjero (y siempre lo han sido) en cualquier área, comunicaciones, infraestructura, tecnología, transporte, medicina etc, en el país no existen los medios necesarios para la fabricación de los bienes requeridos, solo se posee la industria petrolera que tristemente se limita a la estracción del oro negro, ya que siendo los titulares de unas de las reservas mas grandes de petroleo del planeta, no hemos desarrollado la obtención de productos derivados de este valioso recurso, es impresionante que el país necesite comprar neumáticos, plásticos, aceites, combustibles cuando tenemos mas materia prima para la elaboración de estos productos, que los países a quienes vendemos el petroleo, según lo veo, seguimos cambiando espejitos por oro y desmontando los incentivos para el crecimiento de la producción, con lo cual se generan mayores problemas de escasez y desabastecimiento en todas las áreas, mientras que los ciudadanos atacados por el aguijón de la corrupción sin limites, deben luchar al mas claro ejemplo de la ley del mas fuerte.









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